El predio es enorme y bien selvático así que una se siente Jane (lástima que no se ve nada parecido al Tarzán de la tele) En principio fuimos a la guardería de elefantes, allí vimos uno de 5 meses y otro de un año (en las fotos esta) que aceptaba gustoso las banana que le dábamos. Luego nos animamos y dimos un paseito arriba de uno de ellos Nos impactó cuando quien "conducía" al elefante se dispuso a tomarnos una foto. Descendió por la trompa!!! luego trepó por ahí como si fuera una escalera!
Luego fuimos al "Show de elefantes" del que nos levantamos sin terminar de verlo porque a Elena y a mí nos dio pena por los pobres animales... se veía que todas las monerías que les hacían hacer eran bajo castigo de puntazo o tirón de orejas... les hacían hacer cosas de humanos! jugar a la pelota, hacer girar aros, pintar... en fin!
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